La muerte súbita del lactante

Tweet La muerte súbita del lactante no es una enfermedad. Corresponde al fallecimiento rápido e inesperado de un bebé sano, el cual para de respirar sin ningún causante médico aparente. De hecho, las causas que lo provocan son poco conocidas, pero algunas investigaciones científicas han determinado el impacto del neurotransmisor de la serotonina sobre su desarrollo.

Este síndrome surge principalmente durante el sueño y es más frecuente en invierno. Generalmente, la muerte súbita del lactante se produce en los bebés que tienen entre 1 y 6 meses de vida. Las probabilidades son mayores en los varones, prematuros y pequeños que nacen con menos de 2.5 kilogramos.

A pesar de que se desconozcan sus causas, estudios científicos han permitido identificar diversos factores de riesgo. Por lo tanto, es importante conocer los gestos y algunas medidas para prevenir este síndrome.

4 maneras de aminorar riesgos

acostar

Durante muchos años, se recomendaba acostar a los bebés sobre el vientre para evitar que el contenido de su estómago refluya en sus bronquios. Sin embargo, esta posición aumenta los riesgos de muerte súbita del lactante, ya que impide una respiración adecuada y los pequeños pueden asfixiarse con el óxido de carbono que sus pulmones exhalan. Por lo tanto, es preferible colocar al niño sobre la espalda. Toma en cuenta que la posición de lado está también desaconsejada porque el pequeño puede desplazarse sobre su vientre durante la noche.

cigarro

El riesgo de muerte súbita del lactante acrecienta si fumas durante o luego del embarazo. La nicotina y el monóxido de carbono contenidos en el tabaco llegan a la placenta, lo que acelera el ritmo cardíaco e incrementa la presión arterial. Asimismo, las probabilidades de este síndrome aumentan si el bebé está expuesto al humo de cigarro. De esta manera, es primordial no fumar a proximidad del niño.

cama

No debes compartir tu cama con el bebé, ya que un movimiento inadecuado puede acarrear rápidamente la asfixia del niño, ya sea por la frazada o almohada. Se estima que aproximadamente 50 por ciento de las muertes súbitas del lactante se producen en las camas de los padres. Si no quieres que el pequeño duerma en una habitación separada, coloca su cuna en tu cuarto. Acuéstalo sin almohada en un colchón plano y firme. Asimismo, la manta no debe sobrepasar sus hombros.

temperatura

Es esencial que el bebé no tenga demasiado calor porque el riesgo de muerte súbita del lactante incrementa. Su habitación debe mantenerse a una temperatura aproximada de 18 grados. No lo dejes dormir al lado de la calefacción o expuesto al sol. Por otro lado, al colocarlo en su cuna, debes averiguar que sus pies toquen la parte inferior de la misma para que no pueda desplazarse debajo de las frazadas.