Los bebés que nacen por cesárea tienen cinco veces más probabilidades de desarrollar alergias que los que vienen al mundo de forma natural cuando se exponen a altos niveles de alérgenos comunes en el hogar, como los de los perros, los gatos y los ácaros del polvo. Así lo concluye un estudio del Hospital Henry Ford, en Detroit (Estados Unidos). Según Johnson, presidente del Departamento de Ciencias de la Salud del Henry Ford, "estos nuevos avances lanzan la hipótesis de que la exposición a los microorganismos de la primera infancia afecta tanto al desarrollo del sistema inmunitario como a la aparición de alergias". El doctor Johnson dice que los bebés de cesárea tienen un patrón de estar "en riesgo" por los microorganismos en el tracto gastrointestinal que pueden hacerlos más susceptibles a desarrollar el anticuerpo inmunoglobulina E, o IgE, cuando se exponen a los alérgenos, que está relacionado con el desarrollo de alergias y asma.
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