jueves, 2 de junio de 2016

“Bebé Dance” se abre espacio entre las madres



El embarazo y el parto son dos sucesos que modifican enormemente el cuerpo de una mujer, no solo a nivel físico, sino también a nivel hormonal.

De hecho, suceden tantos cambios que en ocasiones pueden afectar al funcionamiento del propio cuerpo y también al funcionamiento emocional, llegando a ocasionar incluso depresiones postparto.
Si bien las madres aseguran que el dar a luz despierta el sentimiento más puro de amor y la emoción más grande que pudieron sentir en sus vidas, también coinciden en que el proceso en sí les ocasiona una serie de alteraciones. Contra esto, hay varios métodos que pueden ayudar a mantener estable a una mujer que acaba de ser mamá y el hacer ejercicios es uno de estos.
Pero ¿Cómo hacer ejercicios cuando todo el tiempo del que se dispone es para el recién nacido o nacida? Ángela es madre primeriza y su bebé tiene cuatro meses de nacido. Ella asegura que desde el momento en que quedó embarazada su vida cambió por completo, pues descuidó a su persona y dejó de tener tiempo para ella misma.
Más ahora que nació su hijo, Jhonatan, quien llora y pide los brazos de su madre para tomar leche, para dormir y para cambiarse de pañal durante las 24 horas del día, dejando en descuido total la figura y apariencia de ella.
Antes de quedar embarazada, Ángela pesaba poco más de los 50 kilógramos y cuatro meses después de su parto llegó a pesar hasta casi 70 kilos, por lo que admite que esto rebalsó sus expectativas sobre las consecuencias de ser mamá. Ya no se arregla como antes, no pesa como antes y no tiene ni una hora al día para cuidarse y mimarse ella misma como antes.
Admite que esto le está ocasionando cierta baja en su autoestima y quiere encontrar la manera de superar dicha situación. Dice que intentó hacer ejercicio, pero siempre en el momento que estaba dispuesta a ejercitar su cuerpo escuchaba llorar a su bebé o éste le pedía algo.
Cuando se le comenta que hay una nueva opción de ejercitar el cuerpo en Tarija, exclusiva para madres de recién nacidos, dice desconocer de esta alternativa pero de inmediato le llama la atención.

Entrena con tu bebé
La clase emana una mezcla de energía y ternura pues al ritmo de canciones muy movidas, Ana Patricia Molina Gallardo entrena a cuatro madres con bebés recién nacidos. En medio de las canciones se puede escuchar cómo las sonajeras o las caídas de los juguetes adornan el ambiente
La puerta abierta de una casa en el barrio 14 Viviendas es la entrada a este nuevo mundo que se abrió para Tarija hace no más de dos meses. Se trata de las clases de Entrena con Tu Bebé o como otros lo llaman “Bebé Dance”, una nueva disciplina en la capital que permite a las madres de recién nacidos poder volver a ejercitar su cuerpo en compañía de su hijo o hija.
Ana Patricia tiene 14 años de experiencia y es instructora internacional de once disciplinas entre las que se encuentran Body Sistem, Body Combat, Body Attack, Body Balance, Zumba, Radical, Trampolín, Spinning, Abdomen class y dance, entre otros; Pero además, es la creadora de Entrena con tu Bebé.
Cuenta que esta nueva disciplina que se ofrece en Tarija nació a raíz de una necesidad que sintió después de que fue madre por primera vez; con una nena recién nacida, problemas de salud en su familia y una paralización de sus actividades profesionales a raíz de su embarazo, ella necesitaba trabajar.
“Cuando tienes al bebé no puedes hacer nada; sobre todo a nosotras las mujeres se nos es muy complicado dejar a nuestro bebé, pero también no nos podemos olvidar de nosotras. A mí me frustraba un poco el no poder entrenar por estar con mi bebé, aparte que es mi trabajo, es mi carrera. Entonces empecé a investigar en internet y empecé a encontrar cosas relacionadas a lo que llamo hoy “Entrena con tu Bebé” y empecé a ver que sí se puede”, dice al recordar el origen de la disciplina en Tarija.
Recuerda que a los tres meses de haber traído al mundo a un nuevo ser, ella agarró a su hija de nombre “Morena” y junto a ella retomó la actividad física armando coreografías en las disciplinas que ella sabía impartir.
Fue en ese momento que recordando la información conseguida en internet y aplicando su experiencia con niños, pues también sabe de motricidad gruesa (correr, saltar, pararse de un pie, botar una pelota, gatear y caminar bien), empezó su tarea de consolidar esta disciplina. Hizo la prueba con diferentes ejercicios junto a su hija y tras varios meses de estudio y pruebas de sus rutinas decidió lanzarlo oficialmente al mercado.
“Las mamás vienen a la clase y bailan, entrenan junto a su bebé y tienen la comodidad de no dejarlos y hacer ejercicios incluso con sus bebés. Hay mamás que tienen hijos de un año y cuatro meses y están con ellos; hay otras mamás que vienen con bebes más pequeños y los cargamos y ellas bailan con el bebé piel a piel”, explica la instructora.
Los ejercicios son acorde a lo que ellas pueden realizar, hay tres niveles de intensidad y esto se refleja cuando las mamás que están con el bebé más grande y sentado pueden saltar más o esforzarse más en el ejercicio. Mientras que las mamás que tienen al bebé “Piel a piel” hacen los mismos ejercicios, aunque con otra intensidad.
Una clase consiste en que el grupo entero de las madres junto a la instructora entran en calor bailando diferentes temas y ritmos. Hacen mucho de la base de zumba, que es merengue, salsa, cumbia y reggaetón; esto lo realizan por un tiempo aproximado de 30 a 45 minutos, dependiendo del día o clase.
Posterior a esto la instructora empieza a focalizar el trabajo muscular, es decir, trabajos específicos para el lumbar, abdomen, glúteos, piernas, y otros. Para esto se utilizan ejercicios de varias disciplinas como pilates, yoga y respiración.
Ana Patricia cuenta que las clases se imparten tres días a la semana: lunes, miércoles y viernes, a horas 9.30 y éstas duran aproximadamente 50 minutos. No se admiten más de siete madres por turno pues de exceder el número ella está consciente que no podría dar una atención personalizada a cada una de las que son parte de su clase.
Cuenta que tiene pensado abrir un nuevo horario por las noches, para aquellas madres interesadas y que ya le hicieron este pedido.

Beneficios
Consultada sobre cuáles son los beneficios para las madres y para los bebés que asisten a estas clases, ella dice con firmeza que uno de los principales elementos que ofrece “Entrena con tu Bebé” a la madre, es la oportunidad de tener un tiempo para ellas, en compañía de lo que más aman en su vida, que son sus hijos o hijas.
“Cuando pasa el tiempo, al menos los tres primeros meses, ves tu cuerpo tan distinto, quieres tiempo para ti y no lo tienes porque un bebé te demanda mucho tiempo y no tienes con quien dejarlo, no quieres dejarlo y eso ocasiona que haya mujeres que nos descuidemos de nosotras por falta de tiempo y eso no está bien”, añade.
Dice que enseñan a la madre a despertar una conexión más fuerte con su bebé, a jugar con su hijo o hija cuando ella está entrenando y asegura que cuando son más grandes, los bebés trabajan mucho con la mamá.
Explica que asistir a “Entrena con tu Bebé” es un tiempo para ellas, porque es la oportunidad de volver a su cuerpo, volver a su peso y sentirse bien como mujer, sentirse lindas como mujer.
Con relación a los beneficios para el bebé, explica que cuando son muy pequeños y deben hacer los ejercicios piel a piel con su madre (cargados en una especie de mochila), pueden terminar durmiéndose rápido, por la misma actividad física que les toca sentir junto a su madre. Sin embargo asegura que con el tiempo esto pasa y ellos se acostumbran.
Cuando son un poco más grandes, los niños y niñas pueden ser algo inquietos y no prestar mucha atención o predisposición a participar de los ejercicios, empero, afirma que como todas son madres en el ambiente y se comprende esta situación, por lo que con la ayuda de todas las participantes esta etapa se supera y al final todo sale a flote.
Detalla que los ejercicios y la misma compañía le ayudan al bebé a ser más sociable, que esté con otros niños, que juegue con otros niños, pero además, ayudan a desarrollar su motricidad gruesa. Porque si las mamás saltan, ellos también empiezan a saltar, si sacan la mano derecha les hacen sacar también la mano derecha.
“Somos el ser que da vida a otro ser y a pesar de eso las mujeres siempre sentimos vergüenza por la celulitis, el rollito, o lo que sea y esto es una manera de que ellas pierdan todo eso que les hace mal, se activen y los maridos tengan a su lado a su compañera linda, fuerte y guapa”, añade.

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