Por qué se da. Los bebés pueden nacer con la displasia de cadera, pero por un problema que viene de familia en familia, de tipo congénita. Otra de las causas es la posición en que el niño se desarrolla dentro de la matriz como en posición sentado con la cabecita arriba y "nalguitas" abajo, denominada posición podálica.
Problema al nacer. Cuando una mujer se embaraza por primera vez y tiene a su bebé en posición sentado, esto es una señal absoluta de cesárea, porque así nunca sale el niño de forma natural.
¿Cómo detectarlo? La mamá no puede, el que se da cuenta es el pediatra, que lo puede detectar en el primer examen dentro de las dos primeras semanas del nacimiento. La revisión que hace el pediatra hasta encontrar el problema en las caderas es un hallazgo de tipo clínico.
Síntomas. Al bebé no le molesta, hasta que tenga que comenzar a caminar, porque a veces una pierna es más corta que la otra y no pueden pararse, porque les provoca dolor.
A los ocho meses, el bebé ya comienza a agarrarse de los barrotes de la cuna para querer pararse, pero no puede mantenerse en pie. Esta es una manera de que la mamá comienza a sospechar que algo no anda bien en su hijo.
Tratamiento. A los bebés con grados leves de displasia, generalmente les ponen unos aparatos ortopédicos que hacen que sus huesos se acomoden de la manera correcta. Así se corrige el problema y el desarrollo sigue su curso normal.
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